Vivo mi mundo y me hago adicto a tó lo que me gusta
ya se que suena raro,l a comparación es justa
asusta, pero quien me conoce sabe de que hablo
esta adicción va mas allá de polvos y letargos.
Dulces recuerdos de cuando el rap se hacía con calma,
de escribir la canción a la novia que hechizó mi alma,
de sufrir con los colegas, dormir en el calabozo,
salir cantando al otro día, asustao y apestoso,
adicto a aquel sabroso pan que no valía ni pinga,
pero que mi lombriz solitaria le daba tremenda linga,
superadicto al maní, a descargar en la esquina,
y enfermo de psiquiatría a los pechos de mi vecina,
adicto a la sardina en lata, lo debo a la mili,
no te aconsejo mezclarla con ron,
porque vas a echar la bilis,
a los Lakers, aunque no encesto un balón,
a Stevie Wonder, las birras, fumar yerba en el balcón,
al respeto, comprensión.
Me estoy fanatizando, no voy a pone las mejillas,
pues se lo que estas pensando,
paso de bandas y bandos, que de niños fueron frikis,
y ahora mismo yo no entiendo, si son repas o son mikis,
adicto a entrelazar palabras, meterme en un drama,
vivirlo, contar los sucesos, reflejar la trama,
a irme de fiesta un lunes, regresar la otra semana,
o acostarme en cama ajena, ya despertar en mi cama.

Mi vida es toda una adicción
de cuando el rap se hacía con calma
de los tiempos de andilanga,
brother y de estos anpamga,
es flow, es sentimiento y la razón para entregar mi alma
por eso escribí una canción que se te meta dentro
y que no se te salga.


La esquina, los 90 en talla, Erasmo tirando planchas,
pantalón de saco de harina, la ticheta superancha,
pinga, que nostalgia!, siento las malas palabras,
pagaría por unos días en estos tiempos,
deja que abran tus oídos,
las rimas de un loco que a visto un poco,
que ha pasao algún que otro sofoco y no a perdió el coco.
La vida me hizo adicto a comérmela,
sobreviviendoa la edad de todavía
entretenerme con los mocos
a conectarme con el micro, cuando subo al escenario
soy el diario de la prosa oscura, la locura,
personificada en la cordura de un sicario,
que asesina a rimas, solo con un beat como armadura,
soy un adicto al rap cuando se hacia con calma,
y con la calma voy a seguirlo haciendo,
aunque la escena se plantee dura
un micro es suficiente, una mano arriba si lo sientes,
y si la mueves es la partitura.

Mi vida es toda una adicción
de cuando el rap se hacía con calma
de los tiempos de andilanga,
brother y de estos anpamga,
es flow, es sentimiento y la razón para entregar mi alma
por eso escribí una canción que se te meta dentro
y que no se te salga.